Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid han incautado trampas ilegales para capturar aves fringílidas en la ribera del embalse de Valmayor gracias al operativo organizado entre octubre y diciembre. Los ejemplares sanos fueron liberados y se trasladó a los incapacitados al Centro de Recuperación de Animales Silvestres. Se decomisaron seis jaulas con reclamo, una jaula mayor en la que se encontraban los pájaros silvestres, una navaja de 20 centímetros, unas tijeras podadoras, dos botes de pegamento-liga y una bolsa de deporte.
Posteriormente se procedió a la liberación de cinco pardillos sanos. Fueron trasladados al Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) los pájaros utilizados como reclamo (cuatro jilgueros y dos pardillos) y dos pardillos silvestres incapaces de volar al tener las alas manchadas de liga.
Concretamente fue localizado un método de captura ilegal denominado comúnmente ‘arbolillo con liga’. Consiste en una rama de encina clavada en el terreno en la que se encontraban colocadas varias ramillas untadas en sustancia pegajosa con el objeto de que los pájaros quedaran pegados para su posterior captura manual.
Para la atracción al lugar de los pájaros fringílidos silvestres se situaron alrededor del arbolillo una serie de jaulas con jilgueros y pardillos a modo de reclamo. Este método de captura está terminantemente prohibido por la legislación de medioambiente y de caza, al ser considerado un método masivo y no selectivo.
La actuación consistió en el decomiso de los elementos y artes, la suelta de los ejemplares silvestres sanos, y el traslado al Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) de la Comunidad de Madrid de los animales incapacitados para volar y de los utilizados como reclamo. De todo ello se levantó la correspondiente acta.
Las sanciones correspondientes a estas actuaciones oscilan entre los 601 y los 60.101 euros, en función de la gravedad de la infracción cometida. Según la normativa, la captura de aves fringílidas está regulada en la Comunidad de Madrid. Esta norma regula la captura en vivo de ejemplares silvestres de verderón común, jilguero y pardillo, para cría en cautividad y su educación en el canto.
La Comunidad de Madrid concede un máximo de 1.500 autorizaciones nominales al año a sociedades federadas, con el objeto de participar en concursos de canto, y se ha de contar con licencia de caza. Establece un cupo máximo de 9 aves por especie, cazador y día, estando prohibida la captura de hembras.
El único arte de caza permitido es la red horizontal o de libro, accionada a través de una cuerda, y que deberá contar con precinto numerado de la Comunidad de Madrid.