La edición en papel de A21 lleva en portada la 80ª edición de la Feria del Libro de Madrid, que será recordada por todos sus asistentes como la de las larguísimas colas para entrar, algo que no se había sufrido nunca en esta fiesta literaria del Retiro madrileño. Las restricciones de aforo a causa del COVID-19 y los casi dos años de espera hasta su celebración han provocado que miles y miles de personas hayan sentido la necesidad de visitarla, pasear entre sus casetas, buscar a sus escritores favoritos en ellas o caminando a su alrededor y, por supuesto, de comprar sus libros y conseguir las firmas favoritas que los convertirán en objetos únicos para siempre.
Y esas colas, algunas de más de una hora y media durante los fines de semana, lejos de desanimar a los visitantes o de ser un incordio insuperable, se han convertido en un símbolo y, sobre todo, en una buena noticia, de hecho, en una noticia muy esperanzadora: “Hay muchas personas capaces de soportar una fila de más de una hora para comprar libros, para tenerlos en su poder, para ver a sus creadores o para lograr una firma o una fotografía”. Y eso es esperanzador, porque significa que la cultura importa, que la literatura lo hace, algo que muchos ya saben desde hace mucho tiempo, pero que, quizá, ahora hemos podido comprobar con un elemento físico y tangible. No hay que olvidar que en el recinto elaborado para esta edición de la feria del libro por excelencia en nuestro país, cabían casi 4.000 personas, que haya otras tantas intentando entrar, repletando el Paseo de Coches de El Retiro y formando una serpiente tan llamativa como curiosa en el interior del parque madrileño es un síntoma y el resultado del excelente trabajo de muchísimas personas.
Por lo que dicen los libreros, la cosa no ha ido nada mal en cuanto a ventas. Esta feria no era nada cómoda para la mayoría de los libreros, ya que ha coincidido con la campaña de libros de texto (que resulta un verdadero quebradero de cabeza para ellos) y con el inicio de un curso que intenta recuperar el estado educativo anterior al coronavirus, pero muchos se han atrevido aun así a meterse en el lío de este encuentro literario y lo han superado con éxito. Podríamos decir que ha sido una fiesta literaria histórica, de la que se hablará mucho en el futuro.

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Un protagonista muy especial
Ha habido grandes protagonistas en esta edición en la que el país invitado era Colombia y en la que han vuelto a destacar los grandes nombres de la literatura de nuestro país: Julia Navarro, María Dueñas, Juan Gómez Jurado, Blue Jeans… Los grandes nombres han acudido a la cita, como no podía ser de otra forma. También en el ámbito infantil y juvenil las editoriales y las librerías han tirado de los grandes éxitos de la publicación, por la feria han estado casi todos los fines de semana Roberto Santiago, Pedro Mañas, Nando López o María Menéndez Ponte entre otros muchos.
Nueva obra de Juan Muñoz
Aunque es probable que esta Feria también sea recordada como la del regreso de un escritor que ha sido protagonista de esta cita durante muchísimos años y cuyos libros puede que sean de los más vendidos y leídos de todos los que se han comercializado nunca en ella, y es que Juan Muñoz, a sus 92 años, ha estado muy presente en casi todos los rincones de la feria durante esta edición. El autor de los grandes éxitos Fray Perico y su borrico o El pirata Garrapata (entre otros muchos), acaba de publicar nuevo libro, El pirata Garrapata en Marte, y eso ha hecho que el profesor madrileño haya recorrido las casetas de punta a punta, haya sido protagonista de firmas entre padres e hijos y se haya pasado por casi todos los programas de radio que se han emitido desde allí, como por ejemplo el programa de Menudo Castillo (Radio 21 Sierra Oeste de Madrid) que se realizó desde el Pabellón Infantil el pasado lunes 13 de septiembre.
Juan Muñoz ha estado presente en muchas casetas firmando, en el Pabellón Infantil, en programas de radio, recorriendo el lugar… y en cualquiera de esos momentos ha recibido el cariño de niños y mayores y ha tenido que firmar algún que otro ejemplar de sus libros, de los de entonces y, por supuesto, del recién publicado.
La Sierra Oeste de Madrid en la feria
Cada año algunos de nuestros autores acaban paseándose o firmando por esta cita indispensable de la cultura nacional, en la que, además, este año se han podido ver a vecinos y vecinas de Quijorna y de Valdemorillo en las excursiones que han organizado sus bibliotecas municipales.
Con miedo de dejarnos olvidado a alguno de ellos, quizá la autora de la comarca que más tiempo haya pasado este año en la feria, sin temor a equivocarnos, haya sido Mar Goizueta, que desde hace varios años se convierte en librera durante la feria y se pasa allí, entre libros, autores y lectores, todos los días de la celebración. Este año, además, ha estado firmando con mucho éxito su nuevo libro, Welcome to the freak show, presentado este verano pasado en Cadalso de los Vidrios.

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