- En colaboración con GREFA y bajo la cobertura del proyecto AQUILA a-LIFE de la Unión Europea para la preservación de la especie.
- Se trata de una segunda oportunidad para esta pareja de rapaces que había fracasado en su intento de reproducción por daños causados al huevo en la incubación del mismo.
- La región cuenta con cinco parejas de águilas Bonelli reintroducidas gracias al programa europeo de protección de la especie.
La Comunidad de Madrid favorece la adopción cruzada del águila Bonelli en el nido de una pareja primeriza de esta especie, en la Sierra Oeste de Madrid, que había fracasado en su intento de reproducción ya que el huevo que incubaban sufrió daños por causas desconocidas. Así, el pasado 14 de abril se depositó un pollo de águila Bonelli, criado en cautividad, en el nido de esta pareja de rapaces.
Esta tarea fue realizada por técnicos de la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad, en colaboración con el Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat (GREFA) y con agentes forestales de la Comunidad de Madrid, expertos en trabajos de altura.
Esta acción, conocida como adopción cruzada o cross-fostering pretende resarcir del fracaso reproductor de esta pareja primeriza de águilas de Bonelli y mantener activo su instinto para criar. Se trata de un programa amparado por el proyecto AQUILA a-LIFE de la Unión Europea para la preservación de la especie que está amenazada por extinción.
El pollo de águila Bonelli depositado en el nido nació hace unos días en el centro de cría en cautividad de esta especie que GREFA tiene en Majadahonda. Este centro, junto a otro de similares características en Francia, se encarga de proveer de pollos de esta águila amenazada al proyecto AQUILA a-LIFE para liberarlos en zonas donde esta especie había desaparecido o se mantiene con poblaciones muy exiguas.
El nido del águila Bonelli en el que se ha depositado la cría se encuentra en la Zona Especial de Protección para AVES (ZEPA) Encinares del río Alberche y río Cofío donde en los últimos años se han asentado cuatro nuevas parejas reproductoras de águila de Bonelli gracias a las reintroducciones de ejemplares, y una en Nuevo Baztan.
El director general de Biodiversidad y Recursos Naturales, Luis del Olmo, ha destacado que “se trata de una acción con la que tratamos de ayudar a la conservación de esta especie que en la Comunidad de Madrid tenía una población reproductora casi testimonial desde hace muchos años”, al tiempo que ha señalado que “los próximos días serán de gran importancia para confirmar si el pollo trasladado se adapta bien al nuevo nido y si la pareja de reproductores lo acoge como propio”.
Se estima que, en esta temporada reproductora salgan adelante al menos cinco pollos de águila de Bonelli en su hábitat natural de la Comunidad de Madrid. En la actualidad existen cinco parejas reproductoras y una más compartida con Toledo en Castilla La Mancha, cuatro de ellas dentro de la ZEPA Encinares del río Alberche y río Cofio, donde se está desarrollando el proyecto de reintroducción.
PROYECTO AQUILA a-LIFE
Ya en 2018 se llevó a cabo una actuación similar con otra pareja de águila de Bonelli en la Comunidad de Madrid bajo el programa europeo. La amplia experiencia de GREFA en adopciones cruzadas ha permitido que esta técnica, se haya aplicado en otras especies como en el caso del águila imperial, el águila ibérica y el buitre negro, el aguilucho cenizo o el cernícalo primilla, entre otras.
El proyecto AQUILA a-LIFE, financiado por la Unión Europea, contribuye a aumentar la presencia del águila de Bonelli en el Mediterráneo occidental para invertir su tendencia poblacional regresiva. El programa incluye la liberación de ejemplares en España e Italia (Cerdeña), y estudia las principales amenazas para el águila de Bonelli, con el objetivo de prevenir y reducir las electrocuciones.