Un año más, Robledo de Chavela ha dado la bienvenida a la Navidad con la Bajada del Bosque, que este año ha celebrado su sexta edición siendo la más exitosa en lo que a número de participantes se refiere.
Más de un centenar de personas se concentraron en la ermita de San Antonio a la puesta de sol, para formar una figura con sus antorchas, antes de comenzar el descenso por los caminos y senderos hasta el Belén de la plaza de España. Esta original cita navideña, ideada por el club K y K en directa colaboración con el Ayuntamiento de Robledo de Chavela y bajo la batuta de Goyo Ibort, aportó una novedad: en el bello mirador de Robledillo, en medio del bosque, apareció, para guiar el camino a los senderistas, la figura de Papá Noel, que les indicaba la ruta con un viejo farol de mano.
El amable señor venido del norte ofreció bombones a todos los niños y mayores, que le dedicaron sus saludos y algunos hasta peticiones, antes de continuar el descenso al centro del pueblo. Una vez allí, los caminantes del bosque, fueron recibidos con el tradicional chocolate que prepara el Ayuntamiento en el Belén de la plaza. Como de costumbre, miembros de Policía Local y Protección Civil acompañaron en la ruta, de poco más de 3 kilómetros, a todos los entusiastas senderistas, entre los que se incluyó, una vez más, el alcalde Fernando Casado.
ALBOS ALAZANES, BRIOSOS CORCELES
Albos alazanes, briosos corceles,
en sus gualdrapas inmersos los versos
del Parnaso en los reversos y anversos
de regio palafrén de oro en broqueles.
Con la Musas imponiendo laureles
espirituales de los universos
de cuantos bardos riman versos tersos
desde Homero grabados en troqueles.
Crines el viento blancas de pegasos,
los unicornios libando en los vasos
los poemas de argonautas marinos,
cedido a los integrantes de Acata,
amantes del verso, el canto y sonata
cuando el nauta Jasón vara en “Los Pinos”.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho