- Original bienvenida a la Navidad.
- Ya de noche y en medio del bosque aguardaba el paso de la caravana Papá Noel.
- El evento concluyó con el tradicional chocolate que ofrece el Ayuntamiento.
Por séptimo año consecutivo, decenas de niños y mayores tomaron parte en la original bienvenida a la navidad de Robledo de Chavela, denominada Bajada del Bosque.
Cuando el sol se ponía por los montes de la sierra oeste madrileña, los robledanos se reunieron ante la ermita de San Antonio y comenzaron a encender luces frontales, linternas o las tradicionales antorchas que el Ayuntamiento de Robledo de Chavela facilita a los adultos que lo deseen.
Tras realizar una figura con sus luces ante la puerta de la ermita, el centenar de senderistas se dispuso a descender hacia el pueblo por el bosque.
Por segundo año, la iniciativa del club K y K contó con la presencia de Papá Noel, que paciente aguardaba en el mirador de Robledillo. Allí, en medio del bosque, en un mágico lugar de vistas inigualables y junto a su farol de luz tenue, Papá Noel supuso el deleite de la caravana, muy especialmente de los niños, que quisieron posar con él, mientras le cantaban.
Después, los senderistas prosiguieron su ruta, monte abajo, hasta adentrarse en las calles del pueblo y, cantando villancicos, llegar a la plaza de España; donde se encuentra el gran belén de Robledo y donde el Ayuntamiento ofreció el clásico chocolate caliente.
La Bajada del Bosque ha sido, un año más, la singular y emotiva forma de dar la bienvenida a la navidad, al estilo más natural y serrano. El propio alcalde del municipio, Fernando Casado, volvió a tomar parte en este descenso nocturno, en el que colaboran Policía Local y Protección Civil de Robledo.