Con el fin de recabar toda la información acerca del empadronamiento paralizado de Eirat acudimos al consistorio de Valdemaqueda, allí nos recibe Álvaro Santamaría, que en su despacho y ante mucha documentación y la legislación vigente sobre adopciones se muestra muy contrariado por la situación y lo primero que nos pide es que no tergiversemos sus declaraciones, para que no ocurra “lo que ha pasado con la SER, donde se ha sesgado la información”.

Ante nuestra pregunta sobre si tiene dudas sobre la legalidad de la adopción, Álvaro Santamaría responde “la adopción tiene una autorización de la India, ellos dicen que tienen una sentencia, viene desde un juzgado indio una declaración legalizando la adopción. Esa adopción debe de ser inscrita, o bien en el Consulado español en la India, o bien en el Registro Civil Central al llegar a España. Es obligatorio. Yo no soy el competente para decir lo que tienen que hacer o para resolver esas adopciones. Pero yo, a la hora de empadronar a cualquier persona en el municipio, necesito unos datos que son obligatorios. Yo no puedo empadronar a una persona sin tener conocimiento de los apellidos. De momento son los adoptantes, cuando la adopción se resuelva, serán los padres adoptivos. Yo no me lo puedo imaginar. No puedes venir a empadronar a una niña sin sus apellidos”.

Alegamos que la Comunidad de Madrid y otros estamentos se han puesto en contacto con el ayuntamiento para instar al empadronamiento y para pronunciarse a favor de los padres y de la legalización de la adopción, así como de los trámites seguidos por los padres. “Es cierto que la Comunidad de Madrid me ha llamado”, se pronuncia “y les he contestado que no hay ningún problema, que me presenten la resolución de la inscripción, el certificado del Registro Civil, el libro de familia donde figure inscrita la niña, una partida de nacimiento correcta… algún documento en el que se me especifique cuáles son los datos identificativos de la menor. De momento todo son suposiciones”. Eirat tiene un pasaporte en el que figuran sus padres adoptivos, pero en el que aún no están registrados sus apellidos, el alcalde de Valdemaqueda vuelve a reiterar en este momento que sin los datos identificativos necesarios el padrón municipal es imposible.

“Cuando llegue la autorización de la adopción”, nos dice, “tendrán que indicarlo las autoridades españolas para que todo sea firme”. Un trámite administrativo que puede durar meses y que podría perjudicar a Eirat a la hora de escolarizarse o acudir al médico, aunque eso es algo que la Comunidad de Madrid ya ha solventado, permitiendo a la pequeña acudir tanto a la Seguridad Social como a un colegio sin este documento municipal habitualmente imprescindible.

“La madre de la niña sabe que sin empadronarse puede acudir al colegio. Pero, es más, nunca te asesoran de que un niño recién adoptado, sobre todo si es como este caso una niña que estaba en un orfanato abandonada, por lo que parece ser, la dejes en el colegio, la escolarices, porque para la niña puede ser un segundo abandono. Lo primero que tiene que hacer es adaptarse a la familia y más adelante tendrá que ir poco a poco al colegio. Si no, no entendemos lo que es una adopción”. Nos comenta el alcalde, que también indica que se ha documentado y ha estado hablando con otros ayuntamientos que han empadronado niños adoptados y con personas que conocen el ámbito de la adopción.

El alcalde no pone en duda la legalidad de la adopción. “Yo no lo puedo poner en duda, porque no lo sé, no soy competente para ello ni lo voy a estudiar. Si la Comunidad de Madrid dice que todo es legal, yo no lo voy a poner en duda”, pero repite “mientras yo no tenga los datos identificativos lo la puedo empadronar”, concluye Santamaría, “el sistema me pide que escriba nombre y apellidos, fecha de nacimiento, sexo, nacionalidad, número de identificación… que datos obligatorios. La adopción se debe refrendar en el país de llegada.”

“Jurídicamente, por mucho que digan, quien está protegiendo más los derechos de la niña es este alcalde que no la quiere empadronar. Realmente, quien la protege, jurídicamente hablando, es el alcalde, porque cuando este alcalde la empadrone será porque la adopción está ya inscrita en el Registro Civil y ratificada por el estado español. Para empadronarla necesito los datos identificativos de la menor. Sin ellos no puedo hacer nada.”

La conversación con el alcalde concluye con una nueva duda por parte del edil sobre el trabajo de los medios de comunicación y su creencia del uso político de la niña por parte de los padres. “Si cumple con los requisitos”, concluye, “no me puedo negar a empadronar a nadie, porque sería ilegal. La Comunidad de Madrid ha escrito haciendo constar el tema de la niña, pero no ha resuelto nada, ¿por qué no ha resuelto si dice que está todo perfecto? Me tendrán que dar el documento con los datos identificativos de la niña”.

Javier Fernández Jiménez.