Luis Javier Martín, Colmenar del Arroyo

Teléfonos, tabletas, minitabletas, lectores de libros y todo tipo de artilugios de comunicación. Vemos por la televisión anuncios donde Movistar, Orange, Jazztel, Vodafone, Ono y otras empresas de telecomunicación nos venden lo último en adsl, fibra óptica, acceso a Internet móvil y fijo, etc. Pero para nosotros todo es mentira porque gran parte de ello es inaccesible.

La verdad de las verdades es que con alguna de estas compañías es imposible establecer una comunicación mínimamente decente ya no en 3G, sino en una simple y sencilla comunicación telefónica, lo cierto y verdad es que con casi todas es imposible mantener una conversación telefónica a través del manos libres de nuestro vehículo sin que se corte continuamente y, en consecuencia, nos cuesta cada establecimiento de llamada un dineral poque esa es otra, pagamos más porque a gran parte de las ofertas no podemos acceder en esa marafa de tarifas delfines, elefantes, XL y S que nos venden las operadoras.

Y la vergüenza tecnológica en nuestra comarca no termina ahí: en un pueblo funciona regular una operadora, en el de al lado la misma ni de coña, en una urbanización no hay manera de que funcione nada y en otras te funciona un poco algo. 

Tengo un amigo obligado a estar conectado las 24 horas que lleva tres teléfonos de tres operadoras distintas porque en su casa le funciona una, en la oficina otra y la que funciona un poco mejor en todos los sitios no le funciona ni en un sitio ni en otro. Además en todas la señal va y viene dependiendo del día. En broma dice que tiene contratado NOIGO.

¿ Y qué contar del ADSL? 10 megas, 20 megas, televisión por Internet… ¿Pero eso qué es? Aquí un mega, tres megas en sitios más o menos poblados y si tienes suerte y a Movistar le ha parecido oportuno seis megas y gracias. Una filfa, una mentira y una milonga. 

Yo me pregunto: ¿Cómo quieren que nuestra zona prospere y en ella se implanten nuevas empresas si es imposible tener unas comunicaciones medianamente decentes? ¿Es que los políticos no se dan cuenta de esto? ¿Por qué se han gastado ese pastón en esas horribles marquesinas, por ejemplo, en lugar de invertir u obligar a invertir en este asunto tan básico para la prosperidad económica como es la telecomunicación? ¿Para cuándo tendremos unas telecomunicaciones civilizadas?