El comienzo del otoño es una fecha de festejos, de recolección de frutos, de vendimia… en nuestra comarca el vino es un bien fundamental, un sinónimo de nuestra riqueza natural y de nuestra vida al aire libre, un fruto de la Tierra y de la habilidad humana que debe celebrarse, y que se celebra, con diversos eventos y festejos. El Centro Cultural Pedro de Tolosa, de Villa del Prado, acogió el pasado sábado 17 de octubre un auténtico homenaje al otoño y al momento de la vendimia, un evento organizado por ASEAPO, la Asociación Española de Amigos de la Poesía, en colaboración con el ayuntamiento pradeño, una fiesta que, como no podía ser de otro modo, estuvo repleta de música y de poesía.
Realizado durante una tarde gris y muy lluviosa, el evento, de casi hora y media de duración, contó con la participación activa de varios representantes de ASEAPO, algunos vecinos de Villa del Prado, que recitaron poemas propios y clásicos, algunos que versaban sobre el otoño, la vid o el vino y otros que habían sido escogidos por su especial belleza o significación para el recitador en cuestión. También pudieron disfrutarse de fragmentos de zarzuelas clásicas en las que se cruzaba la música con la recitación. Rocío Ordóñez, Rafaela Alexandre, Mariana Féride, César Guillén, Emilio Polo, Primitivo Oliva, Rosa González fueron los encargados de conseguir que el ambiente fuese cálido y acogedor con las únicas herramientas que tenían en su poder: los poemas seleccionados y su manera de recitar.
El acto contó además con la contribución de Tres Tristes, un grupo que camina entre el recital y la música, con la irreverencia como punto de partida y con la libertad como sensación y sentido vital. Un grupo muy joven que ayudó a que el evento fuese aún más memorable para todos los que pudieron disfrutarlo.