Entrevista a Silvia Mascaray, técnica de Cultura municipal.

¿Hasta qué punto crees que es importante el Centro Cultural Manuel Entero para todos los vecinos de Colmenarejo?
Es el único equipamiento donde se generan actividades culturales, en el sentido de que Colmenarejo no tiene un cine y no tiene un teatro que no sea el que está en el propio centro, eso hace que el centro cultural sea muy significativo, de hecho, los nuevos vecinos cuando quieren ver qué posibilidades culturales tienen en el pueblo se acercan al centro para informarse. Es el lugar de referencia. Lleva muchos años abierto y está en el centro del pueblo, tiene un horario muy extenso… no es solamente el lugar al que puedes venir a buscar una actividad muy concreta sino también el lugar en el que encontrar información de todo tipo y en el que entrar en relación con muchas posibilidades y personas. También es un lugar en el que entrar en contacto con nuestra red de artistas, que es otra de las labores que realiza el centro cultural. Es una referencia muy clara para muchos vecinos interesados en cultura.

No ocurre en todos los ayuntamientos, pero un buen técnico de cultura es una figura indispensable para tener una oferta cultural de calidad, ¿qué ofrece una figura como la tuya?
Pienso que hay una figura siempre, ya sea la bibliotecaria en municipios más pequeños, pero creo que siempre hay una persona, que además se necesita que permanezca en el tiempo más allá de los cambios políticos y que de alguna manera pueda mantener una trayectoria, una estabilidad. Por lo menos que siempre haya los mismos servicios. Un hilo permanente a los vecinos. También servimos de nexo entre equipos de gobierno. Cuando cada cuatro años los gobiernos van cambiando, alguien tiene que estar para contar qué es lo que ha sucedido anteriormente, cómo se ha respondido a las diferentes demandas por parte de los vecinos, cómo se han afrontado los cambios que ha sufrido el municipio… después cada equipo de gobierno sabrá cómo afrontar sus propias ideas y propuestas.

¿Cuánto tiempo llevas tú en el puesto?
Llevo 22 años.

¿Un municipio en el que resulta sencillo trabajar y en el que tienes libertad para programar?
Bueno… en el año 2000, 2001, 2002… allí se generaron un montón de servicios. Eran los felices años 2000, en los que se generaron muchos servicios, se creó la mayor parte de las escuelas municipales (música, danza, teatro, inglés…), las escuelas deportivas. Fueron años en los que entramos en la Red de Teatros. Hubo una generación muy fuerte de servicios, de equipamientos, de personal… Esa libertad de programación estuvo marcada también por la circunstancia social, en el momento en el que llega la crisis a partir de 2008, todas las posibilidades de programación quedaron marcadas por las circunstancias generales. La implicación vecinal de entonces era mucho mayor que la que existe ahora, no solamente por un tema económico, sino también por cómo se han formado los municipios. Colmenarejo tenía muy poquitos habitantes y fue creciendo en población, vino mucha población joven, por lo que todos los servicios culturales eran muy demandados. Esta población en la actualidad ha envejecido. Nuestro servicio corre paralelo a la situación social y vital del municipio.

¿Cuáles serían los cuatro pilares básicos sobre los que se sustenta vuestra programación cultural?
Por una parte somos el único equipamiento cultural, de tal manera que tenemos que pensar en todo el mundo. Edades, gustos, géneros, intereses… esa idea global de servicio a todos los vecinos es una idea principal. Otra es que el ayuntamiento genera cultura, pero también hay muchos vecinos y artistas que viven en Colmenarejo, que es una realidad que nos encanta y que intentamos aprovechar. Poner en conexión lo que la localidad haga en relación a la cultura, que lo haga la iniciativa vecinal, los grupos, las asociaciones… los individuos que se dedican a la cultura y al arte y el ayuntamiento, otra de nuestras líneas fundamentales. Otra de estas líneas es que no haya cortapisas a la cultura. No estamos en el todo gratis, pero tanto los precios como las cuotas son muy accesibles, para que cualquier vecino tenga posibilidad de participar y de acceder.

¿Existe un censo de artistas del municipio?
Sí. Todo gracias a la iniciativa vecinal. Una revista digital cultural que se crea en Colmenarejo y que tiene los mismos objetivos en cuanto a identificar el municipio todo lo posible con la cultura y que uno de los motivos por los que los vecinos quieran a Colmenarejo sea por la riqueza cultural que tiene. Como una colaboración con esta revista, nuestrocolme.com, y el Ayuntamiento nos pusimos a hacer un censo de artistas para generar una red para que nosotros los conozcamos y para que se conozcan entre ellos y se generen colaboraciones y sinergias que ya han ofrecido algunos resultados como nuestros Veranos Culturales.

¿Disponer de esa red de artistas os ayudó a superar mejor la Covid?
Precisamente fueron dos de los miembros de esta red quienes sugirieron al Ayuntamiento que se pusiesen en marcha las primeras actuaciones al aire libre, fue la manera de atender a una necesidad que ellos planteaban y el Ayuntamiento encontrar la posibilidad de ofrecer una programación para sus vecinos sin los problemas de movilidad, confinamiento de pueblos… y, además, con un objetivo que está por encima de todo que es que los vecinos sepan que entre ellos hay grandísimos artistas.

¿Hay alguna idea o propuesta de cara a 2022?
Tenemos previsto empezar en febrero unas obras en el centro cultural, así que vamos a realizar dos funciones en enero como despedida, seguiremos con nuestro Ciclo de Cine y lo que vamos a hacer con la programación es sacar nuestro centro y llevarlo al municipio. En febrero hemos programado El último romántico al instituto. Vamos a abrir nuevos espacios escénicos fuera del centro cultural.