Este sábado 16 de junio se celebró en Villa del Prado una cata de tomates en el Centro Cultural Pedro de Tolosa, una de las actividades de la III Feria de la Huerta y el Vino. Dos técnicos del Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural (IMIDRA) se desplazaron hasta Villa del Prado para realizar esta novedosa y original cata entre usuarios no expertos. Isabel Fernández y Almudena Lázaro, del departamento de Investigación Agroalimentaria y Horticultura del IMIDRA, estudian las variedades tradicionales de la huerta madrileña.
Ese estudio se lleva a cabo con el fin de proporcionar información útil e innovadora a los horticultores madrileños.
Esta cata es uno de los sondeos de opinión que se realizan para conocer los gustos de los consumidores. Se dio a probar a todos los participantes cinco variedades diferentes de tomate, y tras degustarlos debían rellenar una ficha puntuando cada variedad del 0 al 10 según los atributos de calidad: dureza de la piel, textura y dulzor.
Estos datos se agrupan por preferencias para realizar estudios. El público asistente fue muy diverso, niños, adultos y personas mayores, interactuaron muy bien con las conferenciantes, mostrando su punto de vista y lo que más les había gustado de cada tomate.
Este tipo de catas aparte de recoger datos muy útiles, se realiza para potenciar el análisis sensorial, gusto, olor, vista, tacto… que el usuario aprecie lo que come, la calidad y la buena materia prima que tienen los productos madrileños. Existen 42 variedades de tomate en la Comunidad de Madrid, en la huerta madrileña se siembra especialmente el muy reconocido tomate moruno de Villa del Prado.