Y de concienciación a los jóvenes contra las pintadas.
Con el lema de “¿Grafitis? ¡No, gracias!”, el Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial puso en marcha el día 8 una campaña para concienciar a los más jóvenes de los perjuicios que las pintadas suponen para el municipio, al mismo tiempo que se contrataba a una empresa especializada para que, en las siguientes semanas, trabajen en la eliminación de las mismas.
Coincidiendo con el fin de curso, momento en que los chicos tienen más tiempo libre, se repartieron en los centros escolares, Casa de la Juventud, Casa de Cultura y Polideportivo unos dípticos con 10 razones para decir “¿Grafitis? ¡No, gracias!”. En ellos se hacía hincapié en la importancia de mantener limpio un entorno que es Patrimonio de la Humanidad, en el dinero que se emplea para limpiar pintadas y deja de usarse en otras acciones o en las multas que la ordenanza establece.
Además, para todos los chicos y chicas que se consideren artistas, el Ayuntamiento se ofrece a poner a su disposición un espacio en el que puedan plasmar su obra sin perjudicar al resto de vecinos.
Por su parte, la campaña de limpieza, con un coste de 15.000 euros, viene a reforzar el trabajo habitual de la concesionaria del servicio que, por contrato, ya dedica seis horas y media a la semana a esta labor. La empresa especializada contratada garantiza sistemas de eliminación totalmente ecológicos y un tratamiento de la piedra menos agresivo, a base de proyección de áridos, de chorro de bicarbonato o, incluso, de cáscara de nuez, entre otros y se va a priorizar la limpieza de los espacios públicos y las pintadas con mayor impacto visual en el municipio.
La brigada de limpieza llevará en sus vehículos el lema creado por el Ayuntamiento de San Lorenzo “¿Grafitis?, ¡No, gracias!” y el resultado de las limpiezas se colgarán en la web municipal, dentro de la sección “Antes y Después”, en Medio Urbano.
EL CORUCHO DESNARIGADO
Junto al Camino Real,
y de esto hace luengos años
cuando decían hogaños
y un páramo el Cornetal.
Un corucho y su destral
y podador en su viña
sobre corucha campiña,
y blandiendo las tijeras
en las manos podaderas
el hombre a poco la diña.
Por allí pasó un paisano
con una carga de leña
en una mula pequeña,
parándose campechano.
-¿Que tal la poda Mariano?
-A estos andurriales ando
tranquilamente podando,
cuan quiero echo un cigarro
y tasco la galga al carro
y observo nubes volando.
-Mariano ten tacto y ojo
manejando las tijeras
que a veces son traicioneras,
y te pueden dejar cojo..,
o sin nariz a su antojo.
-Tú no me jodas Manolo,
ni me toques más el bolo.
Y empezó a tijerear
y sin narices quedar
como la estatua de Apolo.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho