
La asociación cultural Las Palabras Escondidas volvió a celebrar una de sus tradicionales galas solidarias de otoño, una cita en la que siempre, desde hace muchos años, recoge alimentos no perecederos para echar una mano a quienes menos tienen. En su labor de difusión de la cultura siempre ha contado para ello con músicos, escritores y artistas de toda clase y condición. En esta ocasión amenizaron la velada Ana Bella López y Fausto Valdés, dos de los músicos habituales de estas ocasiones.
La gala, celebrada el pasado 30 de noviembre en el Centro Cultural Pedro de Tolosa, tuvo una novedad que acaparó la máxima atención del público y provocó que las butacas del teatro estuviesen más repletas que de costumbre. Y es que se estrenaba para el público Duérmete, niña, el cortometraje que la propia asociación ha realizado con el guion ganador del I Certamen de Guion de Cortometrajes y cuyo premio era precisamente ese, la realización de este hito cultural para quienes forman parte del proyecto.
Es el primer cortometraje realizado por Palabras Escondidas y el resultado es digno de admiración. Lo cierto es que el guion de la autora barcelonesa Nati Masegosa era muy bueno, pero el trabajo final desarrollado con él no le va a la zaga. De hecho, algunas personas de la asociación ya están trabajando en nuevos proyectos cinematográficos y se plantean incluso montar talleres de cortometraje para jóvenes.
Estreno de gran repercusión que concluyó con una mesa redonda en torno a la violencia de género en la que participaron la propia Nati Masegosa y tres personas conocedoras del tema: Teresa Ruiz, Marta Abadía y Almudena Moreno.
El cortometraje dura 12 minutos. Se centra en quienes quedan en casa tras un crimen machista y es una fantástica muestra con la que arrancar la rama cinematográfica de una asociación que no para de escarbar en busca de más cultura que ofrecernos.
Javier Fernández Jiménez.