
Ha costado un poco más de lo previsto y hubo nervios hasta casi el último momento, pero el pasado viernes 21 de febrero con una fiesta literaria se inauguró la nueva Biblioteca Municipal de Villamanta, situada en el último piso del Centro Cívico Antonio Simón Cuevas. Con dos espacios destinados al público infantil y al general, la nueva instalación de la localidad “significa recuperar un lugar de encuentro vecinal. Un lugar que mucha gente conecta con su época de estudiante, de ir a hacer trabajos del cole, con exámenes y estudio entre amigos. La biblioteca es el espacio que mucha gente va a utilizar como esparcimiento personal y que va a acercar a muchos niños a los libros” comentaba Patricia Solano, concejala de Educación, Familia y Juventud, entre otros apartados municipales.
“Va a potenciar la lectura y va a generar un clima de aprendizaje y de diversión”, seguía Patricia. Con un horario bastante amplio y de apertura diaria, la biblioteca pretende convertirse en un enclave en el que reunirse y empezar a hacer crecer la vida cultural de Villamanta. Ana, la persona responsable de su gestión diaria, animaba a todos los vecinos de la localidad a usarla todo lo posible y a convertirla en uno de sus rincones favoritos.
La inauguración tuvo muy en cuenta a los más pequeños y contó con la visita de los escritores e ilustradores Inma Muñoz, Cecilia Moreno, Miguel Can y Ana Santos. Hubo cuentacuentos para todas las edades, un taller creativo basado en el cómic Planeta PU y se hizo entrega a todos los niños y niñas presentes de un Pasaporte lector. Una jornada inolvidable que quedará en la memoria de todos los que lo vivieron.
Una inauguración repleta de nervios, nos confiesa Solano, “estaba muy nerviosa desde la mañana, quería que todo saliera bien y que llegase a todos los vecinos. Cuando algo cuesta tanto de sacar adelante los nervios se hacen presentes, quieres que salga todo perfecto”. No es para menos, esta inauguración se ha tenido que posponer durante meses. La historia detrás de este retraso es digna de aparecer en uno de esos libros que permanecerá para siempre en la biblioteca de Villamanta. Hasta en tres ocasiones, una colmena de abejas decidió convertir el tejado del centro cívico en su hogar.
Al final, este imprevisto ha retrasado algunos meses la apertura, pero también ha servido para que este proyecto esté mejor asentado y haya sido estudiado con más intensidad. En palabras del Ayuntamiento: “este espacio no es solo un edificio de pareces y estanterías, sino un centro de aprendizaje, un refugio para la imaginación y un encuentro donde nuestras mentes podrán volar tan alto como queramos”.
Más espacios municipales
No es el único rincón cultural que ha abierto o reabierto sus puertas en nuestra comarca. Hace unos días, empezaba a funcionar la sala de lectura de Pelayos de la Presa, con un refuerzo de horario de apertura y de oferta, mientras los vecinos de la localidad aguardan la reforma y apertura del nuevo centro cultural que estará ubicado en el edificio de la antigua estación. Navas del Rey ya ha acabado la obra del Centro Cultural Marisa Garcelán y ha celebrado algunos eventos en sus instalaciones, aunque parece que todavía habrá que aguardar al menos un par de meses para poder disfrutar de su biblioteca diariamente. Y el Centro de Lectura Carmen Crespo de Valdemaqueda está de celebración tras su primer año de apertura. Los amantes de la Cultura estamos de enhorabuena gracias a estas nuevas ofertas culturales. Ojalá sirvan para hacernos aún más lectores y más amantes de todo lo que nos pueden ofrecer en su interior.
Javier Fernández Jiménez.