
El sábado 7 de junio tuvo lugar la tercera edición de La Noche de la Historia, un evento que cada año gana más proyección por su capacidad de unir cultura, fe y participación popular. Organizada por la Parroquia San Esteban Protomártir y el Ayuntamiento de Cenicientos, con la participación de la Asociación Histórico Cultural Los Desastres de la Guerra y diferentes grupos de la ANE (Asociación Napoleónica Española) de diferentes lugares, tales como Bailén, Badajoz, Camuñas, Castellón y recreadores de Madrid y Móstoles además de la colaboración de diversas empresas locales, esta jornada tiene como objetivo principal la evangelización a través del arte y la cultura.
Combinando tradición, espiritualidad y dinamismo, La Noche de la Historia ofreció un extenso y variado programa que arrancaba a las 11 de la mañana con un desfile de tropas históricas. A lo largo del día, los asistentes pudieron disfrutar de teatro, conferencias, exposiciones, talleres artesanales y actividades pensadas para todos los públicos, desde niños hasta mayores.
Uno de los momentos más esperados de la jornada fue la representación de una obra de teatro en la parroquia a cargo de El Cornetal, y el festival de primavera en la Plaza de España.
También se organizaron visitas guiadas a lugares emblemáticos como la Parroquia de San Esteban, la Ermita de la Virgen del Roble y la Bodega San Esteban Protomártir. En este último enclave se ofreció una muestra y explicación de uniformes y armamento.
A esto hay que sumar un concierto del Coro Polifónico Camerata Cantabile, que aportó una nota de solemnidad y belleza musical a la jornada.
El cierre del evento fue espectacular, con la recreación de una batalla histórica y un castillo de fuegos artificiales que iluminó la noche en un final lleno de emoción y simbolismo.
El párroco de Cenicientos, Miguel Díaz, quiso destacar el espíritu que anima esta iniciativa: “Es un día en el que la cultura, el arte, la música, el teatro, la artesanía, la literatura y la pintura llenarán las calles de nuestro pueblo. Nos acercaremos a los jóvenes artistas y artesanos que, con sus manos, voces y creatividad, nos descubrirán la belleza en un día apasionante”.
Díaz subrayaba además el objetivo de fondo que impulsa esta propuesta: “Queremos evangelizar, reunir a creyentes y no creyentes en torno a la Iglesia, que participen y se impliquen. Dar a conocer esta zona rural a las poblaciones cercanas y a toda la Comunidad de Madrid, y traer el mundo de la cultura hasta el pueblo. Para ello hemos contado con muchas personas y empresas que han aportado su granito de arena”.
La Noche de la Historia se ha consolidado como una experiencia singular en la Sierra Oeste madrileña, donde el arte se convierte en vehículo de encuentro, fe y descubrimiento colectivo. Una cita que, más allá del espectáculo, busca tocar el alma.