
Noche mágica la que se vivió anoche en el Auditorio “Villa de El Tiemblo”. La Banda Sinfónica de la localidad hizo disfrutar a todos los asistentes con un concierto extraordinario.
Para empezar, a la entrada y por gentileza de la Banda, se entregaba a cada niño un instrumento de juguete, lo que hacía presagiar que alguna sorpresa iba a haber en el interior.
En el repertorio una pieza de un compositor tembleño, Ángel de la Fuente, nos hizo recordar melodías de espacios televisivos de antaño. Seguidamente la magia Disney inundó la sala con las bandas sonoras de Frozen, Brave, El Rey León, etc. Todas ellas acompañadas de sus respectivas proyecciones con fragmentos de las películas correspondientes.
De vez en cuando un pequeño sonido de trompeta o de flauta de juguete, hacía sonreír a los asistentes, ya que los niños nerviosos con su instrumento no podían resistir la tentación de dar alguna nota.
La canción de Aladín era el momento adecuado para empezar con las sorpresas. Unas invitadas ya conocidas por todos, el Grupo de Danzas Orientales Hammam de El Tiemblo, bailó extraordinariamente arrancando una gran ovación del público asistente.
Para terminar, lo que todos estaban esperando desde el principio de la velada: el maestro José Antonio Irastorza invitó a subir a los niños que había en la sala que, con sus instrumentos, se mezclaron entre los músicos e hicieron una perfecta interpretación de un popurrí con villancicos como “Feliz Navidad” “Campana sobre Campana” o “Los peces en el Río”. El público acompañó la interpretación cantando y tocando palmas.
Gran colofón para un concierto que ilusionó a pequeños y mayores y que, con un Auditorio a rebosar, demostró que la música es un idioma universal, que hace sentir y vibrar sea cual sea la edad del que escucha. Con la música el dicho de que “nadie es profeta en su tierra” en El Tiemblo no se cumple ya que, cuando nuestros artistas están sobre el escenario, nuestros vecinos llenan las gradas ya sea para escuchar música o para ver baile todos apoyando el arte y la cultura tembleños.
Una vez más la Banda Sinfónica de El Tiemblo agradó al público con su concierto, que como siempre, incondicional, se deshizo en aplausos y bravos.
EL PEREGRINAJE A SOLAS CON SAN ANTONIO
CAMINO DEL TIEMBLO ENTRE NOTAS MUSICALES
La bóveda celeste es cima en alto,
del Cenicientos mágico el fulgor,
y el suelo encallecido del asfalto,
desoye de mis rezos el fervor.
En tanto un grillo le canta a la luna
con sus cris-cris noctívagos de amor.
Angélicos arpegios de una tuna,
vierten a San Antonio y veo yo,
a la alberca bañarse en la laguna.
El Santo con la batuta da el do,
y luces de Cadalso dan reflejo
que impiden emitir un sí o un no.
En sus fiestas Cadalso es un espejo
con su Cristo de guía redentor,
encabezando al pueblo en el cortejo.
Le rodeo y bordeo en derredor
y abordo a Tórtolas su cuesta abajo,
bogando con mis pies de soñador.
Desembarco en el llano sin trabajo,
y helor del riachuelo estremece y da
por un vuelo nocturno de arrendajo.
Mi sombra al Santo encadenada va,
y llegado a Toros de Guisando,
nota musical de parar da en fa.
Pues hora ya parece de ir cenando,
hacemos un remedo de acampada
que permita al esfuerzo ir repostando.
Las piedras totémicas historiada
sus cítaras las mueven con el viento
que música da en cuesta de Tablada.
Imbuido de gran fe y recogimiento,
El Tiemblo ya lo avisto en la distancia,
de mi viaje impulsor y sentimiento.
Lactante soy de espiritual lactancia
y por calles tras del Santo voy en pos,
peregrino de antigua trashumancia.
Y damos tono a nuestro dueto a dos,
y en su ermita una musical soflama,
en tanto dentro del templo el buen Dios
en mi alma sacra música derrama.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho