
Aún faltan unos días para llegar al ecuador de la legislatura y el alcalde de Navalagamella ya ha tenido que reconocer públicamente que su incompetencia ha llevado al municipio a la insolvencia provocada por la falta de liquidez. Una realidad que la concejal de Vox ha venido denunciando durante casi dos años, en los que el regidor y su equipo han negado reiteradamente la situación de endeudamiento asfixiante y la tendencia insostenible de las arcas municipales hacia la quiebra. El alcalde estrella del PP, que presume habitualmente de mayoría absoluta, lograda con promesas irrealizables y gracias posiblemente a las irregularidades detectadas en el Censo Electoral por el INE, ha sufrido durante la celebración del Pleno Extraordinario de ayer, jueves 22 de mayo, la humillación de tener que solicitar públicamente el rescate al Gobierno de la nación, a través del acogimiento al Plan de pagos a Proveedores 2025. Este plan es un mecanismo de financiación para los municipios más endeudados de España, los peor gestionados, aquellos que presentan riesgo financiero evidente y que han sido incluidos por la Comisión Delegada del Gobierno en el listado oficial de entidades locales que presentan circunstancias económicas que las abocan a la quiebra. Solo 13 localidades en la Comunidad Autónoma de Madrid han reunido este año los méritos necesarios para ser incluidas en este listado de localidades insolventes y mal gestionadas, a las que el Ministerio de Hacienda insta veladamente a acogerse a este sistema de financiación a través de su inclusión en el listado en el que ningún alcalde quiere figurar. De las localidades incluidas, Brunete es la que mayor deuda total acumula, pero el regidor de Navalagamella se las ha apañado para superar incluso a esta localidad en términos de deuda media por habitante.
El acogimiento a este Plan de Rescate, supone el acceso a un crédito que endeudará al municipio durante 15 años, cuyos intereses pagarán los ciudadanos de Navalagamella. Y el cobro para los proveedores y acreedores del endeudadísimo Ayuntamiento de Navalagamella tampoco será gratis, ya que para poder cobrar el importe de sus facturas, deberán renunciar expresamente a su derecho legal a percibir la indemnización por pago fuera de plazo, intereses de mora y cualesquiera otros costes de reclamación en que hubieran incurrido. Es decir, que la pésima gestión del alcalde y su equipo la pagarán los ciudadanos y los proveedores y acreedores. Y para el consistorio, supondrá la intervención, de facto, del Ayuntamiento, a través de la sujeción a un Plan de Ajuste que debe ser aprobado por el Ministerio de Hacienda para que los alcaldes menos brillantes puedan acogerse a este rescate y que someterá la gestión del municipio a un escrutinio constante durante toda la duración del préstamo solicitado. Con toda probabilidad, si estuviésemos hablando de una empresa privada, este equipo de gestores tan cualificados y capaces, habrían sido despedidos procedentemente y se estarían enfrentando a una querella criminal por administración desleal, al haber estado ocultando la realidad a los accionistas, que somos los ciudadanos de Navalagamella durante dos años.
Parece que para lo único que ha servido la mayoría absoluta, probablemente ilegítima, del PP en la localidad de Navalagamella es para quebrar el municipio. Y es que resulta que pasada la euforia triunfalista de unas fiestas paupérimas y deslucidas, llega el ostión de la realidad para los talegueros… Las ensoñaciones y promesas del Sr. Samperio y su equipo no van a cumplirse, su programa se va a quedar en panfleto propagandístico y lo único que va a materializarse son las consecuencias de una gestión opaca, a través de la contratación, en palabras del propio alcalde de: “empresas de confianza” que lo único que han construido es un agujero en las arcas del municipio, ya que nadie sabe a dónde ha ido a parar el dinero que se supone que se ha invertido, los servicios en la localidad son insuficientes para atender la demanda y las instalaciones e infraestructuras son justitas y mal mantenidas.
Y no podemos obviar una evidencia incontestable: el Sr. Samperio recibió un municipio con las cuentas saneadas, dinero en las arcas y sin deudas y hoy regenta con mano férrea uno de los municipios más endeudados de nuestra querida España y las consecuencias de su gestión, se notan, además de en la quiebra económica del municipio, en la pérdida de calidad democrática del funcionamiento del Ayuntamiento, ya que las formas, actuaciones y acciones del todavía alcalde, suponen, desde el punto de vista de muchos ciudadanos, un abuso de poder y unas formas dictatoriales impropias en una democracia consolidada.
Rafael Luque Martínez, concejal de Vox en Navalagamella.