La Agencia Estatal de Meteorología ha publicado el resumen anual del año hidrológico correspondiente a la franja entre el 1 de octubre de 2022 y septiembre de 2023. En conjunto, para la España peninsular ha sido un año seco con 560.7 litros por metro cuadrado cuando lo normal es 640 l/m². Esto significa un 12% menos de lluvia de lo habitual y con todos estos datos del año hidrológico, la mayoría de la España peninsular en su conjunto se encuentra en una situación de sequía meteorológica de larga duración desde finales de 2022.
Las zonas de la península con menos precipitaciones han sido el tercio norte peninsular, a excepción de Galicia, gran parte de Andalucía, Castilla-La Mancha y sur de Extremadura. Por el contrario, ha llovido más de lo habitual en el este peninsular. En resumen, este año hidrológico ha sido el duodécimo año hidrológico más seco de la serie histórica, que arrancó en 1961 y el sexto más seco del siglo XXI. La cuenca del Tajo ha tenido un índice de precipitación estandarizado de -0.36. Cuando este valor está por debajo de -1, hablamos de sequía de larga duración. En comparación, la cuenca del Pirineo oriental y el Ebro han tenido valores de -3.04 y -1.89 respectivamente.

El promedio ha sido de entre 500 l/m2 a 600l/m2, en el valle del Alberche y algo más en la zona del valle del Tiétar.

Centrándonos en nuestra comarca y aunque pueda causar algo de sorpresa, nuestra comarca ha tenido un año normal en cuanto a precipitaciones, alcanzándose el promedio de entre 500 l/m² a 600 l/m² en el valle del Alberche, y algo más en la zona del valle del Tiétar entre 600-800 l/m².
Haciendo un poco de memoria, recordemos que el año hidrológico comenzaba con ríos atmosféricos que dejaron abundantes precipitaciones y ayudaron a la recuperación de los embalses. En conjunto, octubre y noviembre del año pasado fueron lluviosos. Posteriormente, el invierno y la primavera fueron predominantemente secos. El mes de junio vino a salvar la temporada para muchos agricultores y nuestros embalses con lluvias abundantes. Posteriormente, el verano volvió a ser seco, aunque con algunas tormentas ocasionales y luego septiembre vino con las lluvias torrenciales provocadas por la DANA que ya comentamos en el último número.
Hay que mencionar que tener un año normal en cuanto a precipitaciones no termina de corregir la sequía y el déficit acumulado de años anteriores y lo que realmente se necesita para recuperarse de una sequía son años en los que las precipitaciones sean superiores a lo normal. En todo caso, nuestra zona continúa en una situación normal sin sequía meteorológica, según los datos de la AEMET.

“Estamos terminando un informe contable para que todos podamos ver desde dónde y cómo partimos”

¿Qué nos espera este otoño-invierno? Lo que parece más probable es que estos meses tengan temperaturas por encima de lo normal. En referencia a las precipitaciones, aunque el mes de octubre fue muy cálido y seco en su primera quincena, la segunda ha visto abundantes precipitaciones. El jueves 19 de octubre se batieron algunos récords de precipitación en la zona centro y nuestra comarca recibió en algunos lugares cerca de 90-100 l/m², casi 1/6 del conjunto del año en un solo día. Estas lluvias han sido muy beneficiosas sin duda.
Según los datos de la AEMET y por la experiencia en los años en que se ha desarrollado el fenómeno El Niño, este suele traer precipitaciones por encima de lo normal a la península Ibérica durante el otoño-invierno. Hay que dejar claro que los pronósticos a largo plazo siempre van acompañados de cierta incertidumbre y en todo caso estas probabilidades de tener unos meses lluviosos son de un 40-50%, mientras que para las temperaturas estas probabilidades suben al 70%.

Mario Cuellar.