• Una nueva llegada al belén de la plaza y chocolatada junto al portal
• En la caravana varios miembros de Policía Local y Protección Civil de Robledo

La quinta edición de la Bajada del Bosque ‘bienvenida a la navidad en Robledo de Chavela’ fue una de las más animadas y la única -hasta ahora- bajo una luminosa luna.

Decenas de niños y mayores se citaron al atardecer en la ermita de San Antonio, donde los participantes recogieron sus antorchas antes de posar para la tradicional foto navideña, mientras repicaban las campanas de la ermita.

Una vez se marchó el sol, los robledanos iniciaron el descenso desde la montaña al centro del pueblo, atravesando el bosque de pinos y encinas entre villancico y villancico.

Como de costumbre, la caravana de luces se detuvo en el mirador de Robledillo, para cantar y para plasmar la imagen de todos los senderistas con la vista del pueblo al fondo del valle. Hubo una curiosa anécdota en la parte más frondosa y estrecha del camino, cuando un niño de unos 7 años de edad se sorprendió al coincidir en un codo del sendero con el alcalde, porque, en efecto, Fernando Casado fue uno de los participantes en esta singular bienvenida serrana a la navidad. También, como en ediciones anteriores, tomaron parte miembros de Protección Civil de Robledo y de la Policía Local.

Todos los senderistas, entre ellos un pequeño en su silla de ruedas -que realizó contento varios tramos- culminaron su original paseo junto al belén del municipio, en la plaza de España, donde concejales, alcalde y personal del ayuntamiento sirvieron, junto al portal, un chocolate caliente.