Un millón de ciudadanos ha contratado participaciones preferentes en sus bancos y cajas por valor de 30.000 millones de euros. Un producto financiero muy atractivo que ahora les ha hecho perder parte de sus ahorros y no poder disponer del resto. A21 ha hablado con varios afectados de la Sierra Oeste. Se vendió como un producto muy atractivo, ya que ofrecía una rentabilidad tres o cuatro puntos más alta que los depósitos tradicionales, pero la gran mayoría no conocía de verdad qué estaba contratando. Se calcula que estos pequeños ahorradores invirtieron cerca de 30.000 millones de euros.