La Sierra Oeste de Madrid es un enclave natural, histórico, social y cultural maravilloso. En nuestros municipios tenemos casi cualquier cosa que podamos necesitar, pero en algunos, desde hace algún tiempo, se viene solicitando un servicio que aún no se está ofreciendo como se merecen y necesitan todos los que viven en ellos. Un servicio imprescindible, especialmente en el ámbito rural en el que habitamos: un servicio bibliotecario de calidad.
Es cierto que, si somos honestos, sí que se cuenta con un servicio tan maravilloso y estupendo como el que ofrece el Bibliobus, que desde 1986, recorre las localidades de la Comunidad de Madrid que no disponen ni de biblioteca ni de centro de lectura. Aun así, disponer de un rincón propio y municipal en el que reunirse, hacer los deberes, realizar consultas, disfrutar de actividades culturales y, por supuesto, tomar libros y otros documentos en préstamo es algo no solo útil, sino también muy beneficioso para cualquier ayuntamiento.
En la actualidad, con la apertura del nuevo Centro de Lectura Carmen Crespo en Valdemaqueda, solo quedan dos municipios de nuestra Comarca sin servicio bibliotecario permanente: Pelayos de la Presa y Villamanta. Pelayos cuenta con una sala de lectura en su casa de la cultura y Villamanta tenía un pequeño cuarto que hacía las veces de centro de lectura, pero tanto uno como otro municipio no cuentan en la actualidad con este servicio a sus ciudadanos.
Es cierto que la normativa indica que no es obligatorio contar con una biblioteca en los municipios que tienen menos de 5.000 habitantes, pero al igual que disponemos de otros servicios públicos o instalaciones municipales contar con un servicio bibliotecario permanente es siempre síntoma de buena salud democrática y social.
Si bien decíamos que Pelayos de la Presa y Villamanta están en la actualidad sin centros de lectura, podemos añadir que ambos municipios esperan tener listas nuevas instalaciones para ello en los próximos meses. El Ayuntamiento de Villamanta se encuentra en estos momentos rematando una reforma en el Centro Cívico Cultural Antonio Simón Cuevas, donde estaba en tiempos la biblioteca local y donde estará de nuevo disponible en un corto periodo de tiempo. El consistorio pelayero lleva también varios meses disponiendo todo lo posible para que el centro de lectura de la localidad sea una realidad en pocas semanas.
Cuando ambos municipios tengan todo en marcha y hayan abierto o reabierto estas bibliotecas o centros de lectura municipales podremos afirmar que contamos con un pleno bibliotecario en la Comarca, lo que es una grandísima noticia para todos los que vivimos en ella.
Javier Fernández Jiménez.