La protagonista de esta curiosa historia de amor animal es Nancy, una hermosa cierva, nacida hace cuatro años en el Safari Madrid. A los pocos días del parto Nancy tuvo que ser separada de su madre por los cuidadores del parque, pues la gabata (las crías hembras de los ciervos) padecía una dolencia en su cadera que le impedía andar con normalidad y seguir a su madre.