La música marcó el ritmo para el fin de curso en Valdemorillo, para la despedida de la actividad que durante meses reúnen las aulas de la EMMDEA, la Escuela Municipal de Música, Danza y Enseñanzas Artísticas. En esta antesala de la vacaciones estivales, los alumnos de las diferentes disciplinas vuelven a poner a prueba lo aprendido alzando el telón del Auditorio de la Casa de Cultura Giralt Laporta para dar paso a unas actuaciones que ya han comenzado a sumar la ovación del público local.
Fueron los más pequeños los primeros en dar el paso para cantar y bailar su danza del color, con su particular escala musical. Unos primeros compases en el festival de fin de curso protagonizado por el alumnado que aprende música en esta Escuela Municipal. Para disfrute de un patio de butacas completamente abarrotado, en la tarde del pasado sábado 9 de junio se fueron sucediendo las piezas de un programa donde no faltaron dúos de piano, la actuación de la orquesta de cuerda y los tonos del conjunto de viento mental Valdebrass, así como la brillante aportación sobre escena realizada por las distintas agrupaciones instrumentales.
Y como broche final a esta acertada demostración de todo lo aprendido en los últimos meses, las palabras de Nines Marín, emocionada en su despedida al frente de la EMMDEA, cuya continuidad y “mucho futuro” quiso subrayar, destacando la permanente apuesta municipal por mantener este proyecto educativo, que arrancó en Valdemorillo hace ahora más de seis años. Recogiendo el testigo, la concejala de Cultura, Beatriz Hernández, también mostró, en nombre del consistorio, el agradecimiento por “los grandes logros” alcanzados en este tiempo.