De todas las celebraciones de carnaval el de mayor raigambre en la comarca es el que se celebra en Cebreros (Ávila) hemos mantenido una charla con su alcalde, nombrado en el 2006, D. Angel Luis Alonso Muñoz, pero que anteriormente ha sido concejal desde el año 1987.

¿Desde cuando se celebran los carnavales en Cebreros?

Se han realizado siempre, desde tiempos ancestrales. Incluso cuando no se podía. En tiempos de la dictadura se intentó prohibir pero no lo consiguieron. Un hecho curioso ocurrió hacia el año 1960, aproximadamente. Enviaron una delegación gubernamental para prohibirlo, pero la gente se vistió de luto e iban detrás de los delegados haciendo como que lloraban… pusieron multas y sanciones por no atender la prohibición, pero al año siguiente o dos años más tarde, el alcalde que entró consiguió junto con el gobernador civil de la época, Don Anselmo Vaca de Osma, que se reconocieran los carnavales. Como no podían ser carnavales pues estaban prohibidos en toda España les llamaron Festivales de Invierno, el propio gobernador civil vino a apoyar con su presencia esta fiesta.

Defensa de nuestras tradiciones

Los vecinos de Cebreros tenemos muy a gala la defensa de nuestras costumbres. La gente tiene muy metido dentro los carnavales. Está por ejemplo el personaje llamado “visaje” que uno de los disfraces más populares. Se realiza abriendo el baúl de los abuelos y sacando de aquí y allá diferentes prendas que sin orden y concierto y de forma rápida montan el disfraz. El caso es pasarlo bien.

¿Cómo ha evolucionado el carnaval?

Ha cambiado mucho, antes era un carnaval de mucha imaginación de visaje y de bodega y ahora es mucho más espectacular en cuanto al desfile, disfraces y carrozas. Sigue unido a la personalidad del cebrereño y cada vez es mayor la fiesta. Tanto es así que hace dos años conseguimos ser una fiesta de interés regional.

Desde el 95 ó 96 se celebra aquí el carnaval provincial. El domingo de piñata se encuentran en Cebreros todos los pueblos de Ávila que de una forma u otra celebran el carnaval, vienen a participar del concurso provincial con sus carrozas y con sus comparsas. De este modo Cebreros se convierte por un día en la capital de la provincia.

¿Qué cree que significa el carnaval para los ciudadanos de Cebreros?

Como le decía antes, son personas que defienden sus tradiciones. Es una forma de evadirse de todo, de la rutina diaria, no es especialmente crítico como puede ocurrir en otras zonas. Es más importante la imaginación. La gente lo que quiere es divertirse.

La gente empieza a trabajar en el carnaval recién terminado el presente. Se forman grupos grandes llamados comparsas, para confeccionar los trajes se reúnen en una casa, talleres o garajes. Para hacer las carrozas  el Ayuntamiento pone a su disposición unas naves para que puedan trabajar. No podrían hacerlo de otro modo, no solo por el volumen que ocupan las carrozas, sino también por la originalidad y la laboriosidad que necesitan. Hacen verdaderas obras de arte. Les cuidamos muchísimo para que puedan hacer su trabajo, que aunque es muy duro, lo pasan muy bien, ya que se organizan entre amigos.

¿Valoran rentable la celebración del carnaval?

Somos un pueblo de servicios y no cabe la menor duda que se nota la afluencia de público durante el carnaval. Es más antes el primer fin de semana era el más fuerte, sin embargo desde que se celebra el concurso provincial es el segundo fin de semana. No solo por los visitantes sino por los propios participantes y la gente que ellos arrastran, amigos y acompañantes.

Hay que tener en cuenta que el primer fin de semana desfilan unas 1.000 personas, pero el segundo fin de semana se puede llegar a más de 2.000, dependiendo de los años.

Una organización de esta envergadura ¿es muy compleja?

Además de la Guardia Civil, la policía y la Cruz Roja, contamos con un nutrido grupo de voluntarios que trabajan con nosotros, y efectivamente las propias comparsas colaboran encontrando el punto intermedio entre la diversión y el orden. El carnaval es para divertirse por lo que no debemos tratar a la gente de forma imperativa eso lo sabemos todos por lo que la gente participa de manera muy amable y colaboradora. Todos debemos hacer un esfuerzo para que la fiesta salga bien.

En cuanto al pregonero

Estamos orgullosos de decir que nunca hemos pagado a los pregoneros que hemos tenido y han sido grandes personales de la vida social y política nacional; hemos traído a gente muy famosa: Carlos Sainz, Pedro Duque, Ana San Juan; incluso Aznar vino en el año 88 u 89.

Pero este año ponemos en valor lo nuestro, hemos traído a un cebrereño y nos hace mucha ilusión. Él está también muy ilusionado, como sabéis es una gran figura del toreo, Luis Gonzalez.

Elena Sanz