La Asociación Cultural Alberche-Albirka participó el pasado sábado 14 de julio en una de las primeras actividades incluidas dentro del Plan de Atracción Cultural de Pelayos de la Presa, una iniciativa auspiciada por el ayuntamiento de esta localidad de la Sierra Oeste. Más de una veintena de personas se apuntó al Paseo Ecológico que consistió en la visita guiada a las pinturas rupestres situadas en los pinares de La Enfermería, cerca del monasterio, y la subida a Casa Quemada y los lanchares del risco de la Mora.

Apenas hace diez años se descubrieron las pinturas de petroglifos en el denominado llano del Higuerón (La Enfermería). Son pinturas rupestres al abrigo de varias rocas graníticas. Estas pinturas se calcula que podrían tener entre 5.000 y 6.000 años de antigüedad y pertenecen a la época del Neolítico, en donde el hombre cazador empieza a buscar sitios de refugio para asentarse definitivamente en un determinado área geográfica.

Miembros de la asociación cultural Albirka actuaron de guías para explicar el significado de estas pinturas rupestres que demuestran que ya desde la antigüedad, la zona de la Enfermería y el Cerro de San Esteban estuvieron  habitados, en parte debido a la presencia de numerosas especies animales que sirvieron de caza al hombre.

Más arriba, los participantes en la excursión pasearon por el llano de Casa Quemada que ofrece al paseante una de las vistas mejores del río Alberche, encajonado entre las sierras de la Paramera y de Gredos. Una excelente vista bien diferente a la que se aprecia desde el muro del pantano.

La cómoda subida al espectacular lanchar del risco La Mora fue otro de los puntos visitados por participantes de esta iniciativa cultural. Los lanchares, muy abundantes en toda la zona del Alberche y por extensión en la limítrofe provincia de Ávila, son formaciones graníticas. Y precisamente desde este lanchar los participantes de la actividad, llevada a cabo por la asociación Albirka, pudieron ver la lancha del Yelmo en la desembocadura del río Cofio, en el Albrika-Alberche, otro de lugares más bellos del valle. Y tras reparar fuerzas disfrutando del paisaje, retornaron al centro de Pelayos de la Presa.