Desde la plataforma ciudadana Salvemos el Castañar de El Tiemblo, que fue constituida hace dos años y medio con el objetivo de conseguir que las autoridades tomaran medidas para frenar el deterioro del emblemático bosque, creen que es posible que, por fin, este otoño comiencen a implementarse las medidas urgentes que han reclamado durante este tiempo, con el fin de intentar minimizar el deterioro que el bosque está sufriendo en las últimas décadas, debido, entre otras causas, a la masificación turística.

Tras una reciente reunión con el equipo de gobierno del Ayuntamiento de El Tiemblo en la que les presentaron sus propuestas, éstas han tenido una buena acogida por parte del consistorio, y ha quedado de manifiesto la voluntad de colaboración por ambas partes, ya que comparten la opinión de que es necesario comenzar a gestionar el entorno de una forma diferente.

Esta opinión, se ve avalada por el informe de octubre del pasado año, del que también se hizo entrega al nuevo consistorio, que realizó el reconocido investigador Juan Fernando Gallardo Lancho, profesor de investigación jubilado del Centro Superior de Investigaciones Científicas y profesor titular excedente de la Universidad de Salamanca, en el que alertaba del deterioro del bosque aludiendo a una gestión que únicamente “atiende al turismo, en ningún modo a la conservación del enclave, sin tener en cuenta la degradación manifiesta y evidente del ecosistema”. Argumentos también sostenidos por personas con un profundo conocimiento de la dinámica de los bosques maduros, como Susana Domínguez, Presidenta de Bosques sin Fronteras, o Francisco Martín Azcárate, profesor del Departamento de Ecología de la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma de Madrid.

En ese sentido, y dada la buena disposición del Ayuntamiento, la plataforma se muestra esperanzada en que este otoño empiecen a adoptarse las medidas urgentes que desde el principio han señalado como imprescindibles (cartelería adecuada, vigilancia en el Castañar , limitación del número de visitantes y prohibición efectiva de recogida de castañas) y que esto sea un primer paso de un proyecto ambicioso en el que estén implicadas todas las administraciones competentes (locales, provinciales y autonómicas), que garantice la conservación del bosque y sirva de impulso a nuevas formas de desarrollo local.

Cabe recordar que son ya 7.500 firmas las que han recogido (presencialmente y a través de change.org) pidiendo para el Castañar una gestión integral, similar a la que desde la Comunidad Autónoma de Madrid se lleva a cabo desde hace décadas en el Hayedo de Montejo de la Sierra (entorno con grandes similitudes con el Castañar de El Tiemblo) que, priorizando la conservación del bosque, y apoyándose en programas educativos y de investigación, ha llevado al mismo a ser considerado por la Unesco Reserva de la Biosfera y convertirlo en el foco de desarrollo de su comarca.