• En el marco de las jornadas promovidas por la Federación de Municipios de Madrid.
• Tuvieron una degustación de sushi maridado con el vino rosado de la bodega.

La tarde del jueves 7 los expertos de 13 nacionalidades que participan en el Proyecto ENSuRe (Red Europea para la Cohesión y la Solidaridad en las Zonas Rurales, en su siglas en inglés),  se dieron cita en la Bodega San Esteban de Cenicientos para conocer de cerca la producción vitivinícola de nuestra comarca. Por la mañana habían participado en San Martín de Valdeiglesias en un acto en el que se desarrollaron varias conferencias sobre políticas de desarrollo rural y mesas de trabajo que abordan cómo combatir el euroescepticismo y la construcción de Europa desde los ciudadanos.

El proyecto responde a la necesidad de una mayor participación de los ciudadanos desde la comunidad local al objeto de construir una solidaridad global europea. Para hacer frente a la cuestión general de este proyecto, se llevarán a cabo 5 eventos transnacionales que girarán en torno a los siguientes temas:

• La búsqueda de soluciones comunes para promover el desarrollo local.
• La interacción con la comunidad, los grupos de acción local.
• La política y las competencias de la Unión Europea relativas a la solidaridad y cohesión.
• ¿Qué impacto tienen las decisiones de la Unión Europea en el contexto local?
• ¿Qué impacto pueden tener las comunidades locales sobre la política de mayor tamaño?
• Herramientas y buenas prácticas de la solidaridad local.

Tras conocer las instalaciones de la bodega, los miembros de las 13 delegaciones participaron en una degustación de sushi ofrecida por Gabriel Gil, empresario venezolano establecido hace más de una década en España y que regenta un negocio en el vecino pueblo de Pelayos de la Presa. “Nunca había probado un vino tan adecuado para acompañar a esta comida típicamente japonesa hasta que probé el Piedra Escrita Rosado”, manifestaba Gil sobre el caldo producido por la cooperativa de Cenicientos, añadiendo que siempre lo utiliza en sus degustaciones y que “en Japón triunfaría”.

Pedro Puentes, presidente de la bodega corucha, se sintió halagado por estas palabras recordando que este vino ya ha obtenido varios premios y que su secreto es la uva garnacha que se produce en la zona. “Somos el mayor productor de esta variedad en la Comunidad de Madrid”, afirmaba satisfecho.

La alcaldesa Natalia Núñez, que estuvo acompañada por el secretario general de la Federación Madrileña de Municipios, Juan Carlos Muñoz Becerril, y por José Barcia, coordinador general técnico  de la misma, valoró muy positivamente esta iniciativa reclamando “un mayor apoyo para las zonas rurales como la nuestra en las que la despoblación es un problema endémico que va a más y que lastra notablemente el desarrollo de buena parte de los municipios de la Sierra Oeste, en nuestro caso”.

Junto al socio promotor, Ric Slovenska Bistrica (Eslovenia), participan en este proyecto Municipality Trudovets (Bulgaria), Lag „Central Istria” (Croacia), University of Thessaly (Grecia), Kistarcsai Kulturális Egyesület (Hungría), Associazione Alessandro Bartola (Italia), Ligatne Municipality (Letonia), Municipalitie Kolasin (Montenegro), Municipality of Lask (Polonia), Albia County Council (Rumanía), Fond „Evropski Poslovi“ Autonomne Pokrajine Vojvodine (Serbia), Diputación de Málaga (España), Hranicka Rozvojova Agentura (República Checa) y la Federación De Municipios De Madrid (España)