El martes 7 de febrero el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobó la selección de los nuevos colegios e institutos que a partir de septiembre de 2017 implantarán el programa bilingüe en sus centros, entre ellos el IES Pedro de Tolosa de San Martín de Valdeiglesias.
Esta medida supondrá que el Instituto se va a transformar en centro bilingüe pero solo en los cursos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y no afectará al resto de especialidades que actualmente se imparten.
La implantación del bilingüismo se va a realizar de una forma flexible, adaptándola a la realidad de nuestro municipio y respetando todas las opciones de las familias (tanto las que optan por el bilingüismo como las que no), tras los acuerdos alcanzados el pasado mes de enero entre el Instituto y la dirección general de Innovación Educativa de la Comunidad.
Entre otros aspectos, se acordó que los grupos de alumnos estarán mezclados en las clases para evitar así la segregación y solo se separarán en las asignaturas de inglés que sean diferentes para los alumnos acogidos a la sección o al programa, como si fuesen desdobles.
Además, los alumnos con buen nivel de inglés podrán acceder a la sección bilingüe previo examen gratuito realizado por los profesores del Instituto.
LA LISTA DE LOS REYES GODOS
A mis amigos y compañeros de generación
en la escuela de Cenicientos.
Entre angustias y sudores
y calvario de los ojos,
padecimos sinsabores
por culpa de promotores
imperiales con antojos.
Con España hecha un erial
entre la hambruna masiva,
trajeron al pegujal
y escuelas del andurrial
a godos en comitiva.
Se empeñaron los jerarcas
con empeño denodado,
supiéramos de monarcas
que aún calzaban albarcas
y a la Hispania gobernado.
La lista estaba formada
por treinta y tres visigóticos,
y era así tan alargada
y tan densa y tan poblada
por reinar reyes caóticos.
Se morían de repente
o de pronto asesinados
y otra coronada frente
ante aquel cuerpo presente
allí mismo nominados.
Candidatos eran varios
los aspirantes al trono,
y en aquellos escenarios
de títulos nobiliarios
disputaban con encono.
En círculo nos ponían
a coruchos escolares,
y salmodiar nos hacían
mientras espaldas crujían
a los godos seculares.
La lista la encabezaba
Ataúlfo, era el primero,
Sigérico al que heredaba
Walia y luego lo alcanzaba
Teodorico el guerrero.
Le sucedió Turismundo
y Teodorio después,
Alarico más jocundo
y nosotros ni un segundo
de recitar sin traspiés.
Después con el cisma arriano
Gelaelico cismático,
y Amalarico algo vano,
que fue un buen rey ciudadano
que se acomodó pragmático.
Theudis, luego Teusidelo,
Agila y Atanagildo,
Liuva que miraba al suelo
y Leovigildo al cielo
por culpa de Hermenegildo.
Llegó Recaredo y Siuva,
Witérico y Gundemaro,
que dicen que el mosto de uva
lo trasegaba cual cuba
de tonel hispano avaro.
Nombres hay repetitivos
de ordinal correspondiente,
sobrevivían los vivos
si no acababan cautivos
del nuevo rey y de su gente.
Suíntila con Sisenando,
Thintila y sucedió Tulga,
Khindasvinto fue reinando
con Recesvinto esperando
como un can cuando se espulga.
Wanba delegó en Ervigio
Egica reinó con Witiza,
¡cuánto rey, cuanto litigio!,
sin llevar el gorro frigio
hartos de godos en liza.
Rodrigo fue el colofón
de tanto godo en el trono,
¡qué castigo qué tostón!,
salmodiando relación
con voz meliflua en el tono.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho