Tras la reunión mantenida con los portavoces socialistas de los municipios afectados por la nueva línea de alta tensión cuyo trazado pasa por Galapagar, Colmenarejo, Valdemorillo, Villanueva de la Cañada, Brunete, Quijorna, Villaviciosa de Odón, Arroyomolinos, Móstoles y Moraleja de Enmedio, el responsable de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente del PSM y diputado regional, José Manuel Franco Pardo, exige la inmediata paralización del proyecto por las “irregularidades” que se están produciendo en el proceso y por la “opacidad” con que los gobiernos municipales y autonómico del PP están actuando.

Según ha explicado el responsable socialista, las Comunidades Autónomas tienen que elaborar las previsiones energéticas y el Gobierno central aprobar la planificación tomando como base el escenario macroeconómico actual y las previsiones de demanda, circunstancias que, a su juicio, “no se dan” en este proyecto, puesto que su origen se retrotrae al año 2005 y puesto que ha sufrido “muchas vicisitudes por su falta de encaje y deficiencias de todo tipo que no se han subsanado”.

En este punto, Franco Pardo ha indicado que según lo establecido en la ley sobre el transporte de energía y por diferentes normas comunitarias, “no se puede dar ninguna autorización de instalación de redes de transporte de energía eléctrica salvo que haya circunstancias excepcionales que tengan que ver la existencia de riesgo inminente en el suministro”, que en este caso “no se dan”.

Además, desde el punto de vista medioambiental, el socialista ha considerado que este proyecto es “absolutamente insostenible”. “No debemos olvidar que afecta directamente al Parque Regional del Guadarrama que goza de la máxima protección y perjudica de forma sustancial a los pequeños municipios de la zona” ha señalado tal y como pone de manifiesto la portavoz socialista de Colmenarejo y miembro de la Ejecutiva regional del PSM, Macarena Elvira Rubio, en el que el 70% de su término municipal está dentro del citado parque.

Por otra parte, Franco Pardo ha resaltado las “contradicciones” que se están produciendo entre los diferentes alcaldes de los municipios afectados. Así, mientras la alcaldesa de Colmenarejo (PP) se opone a este proyecto, la de Quijorna no sólo no se opone, sino que ha concedido la autorización administrativa sin informar previamente al pleno, rechazando la moción presentada por la portavoz socialista del municipio, Azucena Concejo, en la que el Grupo Socialista se oponía a que esta línea atravesara el municipio debido a los “perjuicios que puede ocasionar a los vecinos en términos medioambientales y de salud pública”.

En este sentido, Franco Pardo, ha señalado los efectos que para la salud tiene la instalación de línea de alta tensión. “Existen diferentes estudios científicos sobradamente contrastados de organizaciones como la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Parlamento Europeo, universidades como Oxford, colegio de ingenieros industriales de Madrid, etc que resaltan la relación directa que existe entre los efectos de los campos electromagnéticos y la incidencia sobre la aparición de graves enfermedades entre la población expuesta a los nocivos efectos de dichos campos” ha argumentado.

En definitiva, los socialistas de la región consideran este proyecto “ilegal” y “fuera de toda planificación objetiva” conforme a las necesidades actuales y futuras, así como que sólo responde a “intereses pocos claros que el PP está gestando a espaldas de los vecinos, perjudicando claramente a una parte muy importante del territorio autonómico que es clave a nivel medioambiental en nuestra Comunidad”

“Por lo tanto, solicitamos la inmediata paralización de dicho proyecto, así como la apertura de un debate amplio y transparente sobre las necesidades energéticas de la Comunidad de Madrid” ha concluido.

En la misma línea se ha manifestado la portavoz socialista en Colmenarejo, municipio afectado, y miembro de la Ejecutiva regional del PSM, Macarena Elvira Rubia, quien, tras mostrar su absoluto rechazo a este proyecto, asegura que este proceso para la instalación de una nueva línea de alta tensión está siendo llevado a cabo con “opacidad”, a la vez que ha denunciado que “lo más grave de todo” es que sin estar aprobado el proyecto han empezado las obras en algunos municipios.