Toda la Sierra Oeste celebró el Día del Libro, con este titular aparece el número de mayo -el número 112- del periódico mensual independiente y gratuito de la Sierra Oeste de Madrid y alrededores, que además dedica un homenaje a Mariano García Benito, con motivo del quinto aniversario del fallecimiento de la persona que cedió gratuitamente el Monasterio de Santa María la Real de Valdeiglesias al pueblo de Pelayos de la Presa.
Cristina Cifuentes, en el discurso del Día de la Comunidad, anunciaba que la corrupción ha llegado a su fin en la región después de que un caso más salpicara al Partido Popular con el caso Lezo. El excalde popular de Cenicientos, Jesús Ampuero, también está siendo juzgado y las acusaciones piden para él hasta ocho años de cárcel.
Todos nuestros municipios han celebrado con devoción y vuelta a los ritos tradicionales la semana de Pascua. Ofrecemos una sucinta muestra de los actos religiosos más representativos de la Semana Santa en la Sierra Oeste de Madrid.
En lo deportivo, especial mención para el Campeonato de España de Artes Marciales, celebrado en Villa del Prado.
LAS BIBLIOTECAS DE ALCORCÓN
“¡Qué triste es morirme ahora con tantos libros que me quedan por leer!”
(El maestro Azorín)
Para cuantos somos lectores empedernidos
y nuestros libros por paredes techos alcanza,
sonreímos por comentarios tan repetidos:
“Dinero en libros desequilibra mi balanza,
ni medios tengo, ni apetencias para lecturas
en estos tiempos de zozobra y desesperanza”.
Pero tenemos bibliotecas y sus culturas,
y un remanso de vida, en paz y recogimiento,
está en estos templos diverso en literaturas.
Son gratuitas son confortables, son distraimiento
sobre escenarios remotos y maravillosos,
y sus fuentes sacian la sed del conocimiento.
Hay libros tristes libros, alegres y gozosos,
los autores son provenientes del vasto mundo,
y en las manos que los amamos son amorosos.
Hablan de riqueza y pobreza en otro submundo
de guerras del pasado y grandes revoluciones
y de filósofos del pensamiento profundo.
Nos cuentan del auge y esplendor de las naciones
culturas finadas y decadencia de imperios,
y guerra púnica y cainita entre religiones.
Su paginar escrito, imparte sus magisterios
y abre las mentes a la luz del entendimiento,
despejando la Historia de sombras y misterios.
La Biblioteca “Centro”, entre iglesia y sentimiento
de Dios, morada de nuestros geniales Migueles,
Cervantes y Hernández, y un Unamuno irredento.
En “José Hierro”, poetas ungidos de laureles;
en la “Vilumbrales”, Galdós con el Diecinueve;
y en la del “Parque”, Blasco Ibáñez de huerta y vergeles.
En “Ciudad de Nejapa”, su variedad me mueve,
y en su paz aposentada en silencio medito
en la biblioteca de Dios que el alma conmueve.
La “Fuente Cisneros”, es la que menos visito,
aprovisionada de españoles y franceses
y libros graves de un qué otro famoso erudito.
La del “Pinar”, con rusos, alemanes e ingleses
lejos de casa me coge bastante a trasmano,
pero para mí el libro es una trilla de mieses
que me produce un pan espiritual en la mano.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho
LA BIBLIOTECA MIGUEL DELIBES
Orilla a la iglesia blanca,
iglesia solemne y bella,
la biblioteca descuella
por tener su puerta franca.
Allí el lector no se estanca
pues dentro está don Miguel
con libros en anaquel
que escribió en Valladolid
y recalando en Madrid
brillan impreso en papel.
Saturnino Caraballo Díaz
El Poeta Corucho