- El próximo 7 de agosto, los “Peregrinos Handbike” se ponen en marcha para recorrer un tramo de 400 km del Camino de Santiago en su ruta más famosa, el “Camino Francés”, desde Roncesvalles, en las estribaciones de los Pirineos donde confluyen las rutas medievales de peregrinación europeas, hasta Sahagún, en la provincia de León.
Cuando José Santiago Pérez, vecino de Villanueva de la Cañada y paciente nuestro, nos contó hace unas semanas el reto personal que se habían propuesto cuatro amigos practicantes del handcycling, y habituales de las competiciones de esta modalidad de ciclismo inclusivo en España, su iniciativa deportiva y personal nos pareció fantástica y quisimos apoyarles para dar visibilidad a este colectivo que es todo un ejemplo de superación personal. Para las personas que han sufrido una lesión medular, o la amputación de sus miembros inferiores, las handbikes representan una posibilidad de ocio, un ejemplo de superación personal, la mejora de su salud física y psíquica y, ¿por qué no?, una forma de divertirse en grupo que, además, crea espíritu de lucha y disciplina deportiva. Si a eso le sumamos los valores que representa El Camino de Santiago en sí mismo, como son la fortaleza del ser humano en la consecución de metas, la solidaridad y el interés por los demás, o la satisfacción y el gusto por el trabajo en equipo, no es extraño que nuestro Director Médico, el Dr. José Rada Gil, sintiese un impulso inmediato de colaborar en su iniciativa. “A nivel de esponsorización privada, es difícil encontrar proyectos que encajen tan bien con la filosofía que nosotros mismos intentamos imprimir en nuestras clínicas y, sobre todo, en nuestro Servicio Móvil Dental con el que llevamos años trabajando con discapacitados, tanto físicos como psíquicos”, dijo.
José Santiago Pérez, Miguel A. Letón Carrasco, Ignacio Tremiño Gómez y Marcos Bravo García, nuestros “Peregrinos Handbike”, están acostumbrados a la competición, tanto en los autódromos de Cheste y Jerez, como en trazados urbanos, pero ahora que sus trabajos les permiten juntarse en verano, quieren afrontar un reto más difícil que ya ha realizado uno de ellos este año en su tramo gallego final, Ignacio Tremiño, diputado del PP por Valladolid en el Congreso y ex Director General de Políticas de Apoyo a la Discapacidad. “Nacho”, que lleva muchos años trabajando en el desarrollo de políticas de accesibilidad para personas con discapacidad, la eliminación de barreras y la inclusión social y deportiva de los discapacitados, nos ha dicho que “el año pasado pude comprobar, por mí mismo, la emoción que describen todos los peregrinos que realizan esta ruta, Patrimonio de la Humanidad, al entrar con su handbike en la Plaza del Obradoiro”.
A Miguel A. Letón y José Santiago los habrán visto entrenar los vecinos de Villanueva de la Cañada por las vías pecuarias hasta Brunete, Villafranca o Quijorna, o en un circuito cerrado de 16 km. que ellos mismos han improvisado aprovechando el carril bici y la variante del Aquópolis. Uno de los problemas a los que se enfrentan los handbikers es la necesidad de utilizar rutas sin tráfico para sus entrenamientos. En esta ocasión, y para alcanzar la fortaleza física necesaria para realizar cada etapa diaria de 60–70 km que se han marcado como objetivo, han entrenado también en la Casa de Campo, enlazando el carril bici Madrid Río con el de 24 km. que llega hasta San Martín de la Vega.
No hace muchos años que se permitió la participación de handbikers en las grandes maratones y carreras urbanas más conocidas, a lo sumo cuatro o cinco años. Los atletas en handbikes hacen su salida minutos antes de que comiencen la carrera los corredores de élite y el grupo general. Nos cuenta José Santiago que, por ejemplo, a partir de 2017, en la Maratón de Madrid han empezado a contar con ciclistas voluntarios que les acompañan durante toda la carrera y les van señalando los giros y marcando los baches, lo que les resulta muy útil para alcanzar marcas de competición desde su posición casi tumbada, que corresponde a la categoría H4 dentro de la modalidad de ciclismo inclusivo. En El Camino también les acompañará un ciclista, para visualizarles en los tramos con circulación, y un coche de apoyo. Ignacio Tremiño y Miguel A. Letón han participado, incluso, en una de las media maratones más difíciles de España: la Behobia-San Sebastián, en la que participaron 34 handbikers el año pasado. La inscripción se abre de nuevo el 14 de septiembre y seguro que se apuntan de nuevo en 2018. Esperamos que Marcos Bravo, el último que se ha incorporado al grupo y ha comenzado a entrenarse más tarde, también se inscriba porque, como nos dice José Santiago, “es una promesa y está haciendo muy buenos registros”.
En España también se celebran competiciones, femeninas y masculinas, específicas para handbikes en las cinco categorías existentes, en función del grado de discapacidad de los atletas, desde la H5, para los que tienen el menor grado de discapacidad y pueden utilizar las hadbikes sentados, arrodillados o erguidos, hasta la H1, categoría reservada a los atletas de movilidad más reducida con tetraplejias incompletas y movilidad reducida severa de brazos, que pedalean con las manos totalmente tumbados.
En Madrid existen dos fundaciones dedicadas a fomentar la integración social de personas con discapacidad física, intelectual y/o sensorial a través del deporte: la Fundación Deporte & Desafío, a cuyo patronato pertenece Ignacio Tremiño, y la Fundación También, en la que participa José Santiago.
Otro de los problemas que impide la generalización de esta práctica deportiva entre los discapacitados físicos es el coste de estas bicicletas adaptadas. El precio de la más básica no baja de los 6.000€ y, como nos ha comentado José, él corre en las pruebas del Campeonato de España con una handbike prestada por la Fundación También, que ya ha colaborado con el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo aportando otras handbikes destinadas a la recuperación de los pacientes mediante el ciclismo.
En Estados Unidos, el Handcycling se utiliza como entrenamiento complementario en otros deportes, y no necesariamente por personas con discapacidad, porque el uso de estos cicloergómetros manuales mejora la eficiencia cardiaca, la condición cardiovascular general, la capacidad pulmonar y el desarrollo de la musculatura del tronco y las extremidades superiores.
A todos nuestros “Peregrinos Handbikes”, lo que les mueve a superarse y participar en eventos deportivos, o a realizar una ruta difícil para el handcycling como es El Camino de Santiago, es “la sensación de libertad” que les proporcionan sus bicicletas adaptadas, algo en lo que quienes no tenemos una lesión medular no nos paramos a pensar hasta que alguno de ellos nos la describe con pasión. Algo tan sencillo como “Sentir el aire en la cara” resulta, para todos, inspirador. Contar con la posibilidad de utilizar para entrenar espacios como el autódromo del Jarama, o que las fundaciones dispusieran de más medios para facilitar el acceso a estas bicicletas adaptadas sería un estímulo para la inclusión de otros discapacitados que aún no han probado una handbike y un deseo compartido.
Vamos a seguirles en su ruta, porque nos mandarán fotos de los lugares increíbles por los que transcurre El Camino, y las publicaremos para dar visibilidad a estos grandes atletas, amigos y alguno de ellos residente en Villanueva de la Cañada. Desde nuestras clínicas sobre ruedas, el SMD Servicio Móvil Dental, que nos mueven a nosotros por España como pioneros en el tratamiento odontológico en centros sociosanitarios para personas mayores y discapacitados, y desde nuestras sedes en el Centro Médico de Villanueva de la Cañada y en Madrid, el equipo que formamos la Clínica Eugenia de Montijo y SMD les deseamos a todos un ¡Buen camino!
Susana Cobos es directora de Clínicas Eugenia de Montijo y SMD Servicio Móvil Dental.